Por incumplimiento de la ESSA en el servicio de energía eléctrica rural, los labriegos, jornaleros y campesinos de corregimientos y veredas del municipio de San Pablo, Bolívar, se tomaron el puente del río Cimitarra y cerraron la vía. Todo empezó con pocos ciudadanos del campo, pero con el paso del tiempo fueron aglutinándose en la vía que de Cantagallo conduce a al municipio de San Pablo.

Los protestantes señalaron a EL ORIGINAL que intensificaran las manifestaciones hasta que la empresa Santandereana, una de las más mala en servicio y costosa y que además suministra el servicio de energía a la zona rural responda por las daños y perjuicios que han dejado los apagones y los prolongados cortes que superan hasta días, e incluso por el elevado costo del kilovatio que ya alcanza mil pesos.

Mañana cerraran la vía que perjudica la movilidad y a la vez al comercio, el transporte de pasajero del sur del departamento de Bolívar, que en el pasado han vivido los paros más terribles de la región